El pasado domingo tuvimos la oportunidad de entrevistar a Gerardo García, comunicador y fotógrafo durante el día, pero baterista de Heavy Metal en las noches. Gracias a un contacto pudimos visitar su estudio y pudimos platicar un rato con esta increíble persona, quien desde 1997 es el baterista latinoamericano de Ángeles del infierno, banda española de Heavy Metal fundada en 1978, considerada como una de los mayores exponentes del género en español.
Gerardo vive en la colonia Providencia
en la alcaldía de Azcapotzalco, en donde también tiene un estudio de producción
musical. Eran alrededor de las 4 de la tarde cuando arribe a su estudio, su
hijo fue quien me recibió y comento que Gerardo llegaría en unos minutos, me
invito a pasar y espere dentro del estudio. Unos minutos mas tarde llego Gerardo,
vistiendo una playera de futbol, gorra y un pantalón oscuro, cabe mencionar que
al entrar traía un taco que estaba comiendo, saludo a todos los que estaban
presentes y me mostro su estudio. Nos sentamos en su escritorio, tomo una
congelada y comenzamos la entrevista.
Comencé la entrevista con la
siguiente pregunta:
¿Cómo empezaste en el mundo de
la música y cuales son tus primeros recuerdos relacionados con este mundo?
Gerardo nos comentó que comenzó a tocar a los 10 años, su mayor influencia fue su hermano Antonio quien era chef e hizo una banda de Rock con sus amigos de la prepa por lo que compro una batería que a Gerardo le empezó a llamar mucho la atención, tanto así que cuando su hermano no estaba, Gerardo se la pasaba practicando todo el tiempo sin parar. Lamentablemente Antonio falleció, pero su sueño de ser un gran baterista no desaparecería ya que su legado paso a Gerardo, quien junto con su otro hermano Oscar continuarían en el camino de la música.
La siguiente pregunta que realice
fue la siguiente:
¿Antes de estar en Ángeles del
infierno en que proyectos llegaste a participar?
A lo que cómicamente Gerardo me contesto “En el patio de mi casa”, ya que nunca antes había participado en un grupo reconocido, hacia tocadas pequeñas para familia y amigos.
Después procedí a preguntarle:
¿Cómo llegaste a Ángeles del
Infierno?
Gerardo nos conto que el era un
gran fanático de la banda, los iba a ver cada vez que venían a México, por
coincidencia Gerardo era amigo del técnico de la banda, quien le informaba de
todas las presentaciones que se realizarían, un día su amigo le dice que Los
Ángeles del Infierno vendrían a México pero tuvieron problemas con su
baterista, quien no se presentaría, por lo que el manager estaba buscando
bateristas para audicionar. Su amigo lo invita a formar parte de la audición,
pero solo como relleno, toda vez que ya había otros bateristas en la lista, aun
así Gerardo acepta. A continuación adjunto audio de la parte de la entrevista
en la que Gerardo describe esta extraordinaria audición, también la canción "Fuera de la Ley" del grupo.
Posteriormente, Gerardo paso a
describir su experiencia con la banda, nos menciono que fue muy impactante el
presentarse en escenarios con gran cantidad de personas, su primera presentación
fue la más difícil, pero cabe señalar que las posteriores las fue disfrutando más.
Gerardo acompaño a la banda en todo el tour de México, a los 3 meses acabado este,
le hablaron y le hicieron la propuesta para tocar en dos conciertos masivos,
abriendo para Iron Maden a lo que Gerardo acepto. De ahí en adelante Gerardo comenzó
a viajar por todo América y algunas partes de Europa.
Posteriormente le pregunte lo
siguiente:
¿Cuál ha sido tu mayor satisfacción
como musico?
Gerardo comento que su mayor satisfacción
fue cuando viajo a España en 2011, ya que pudo convivir con grandes bandas como
Scorpions y Europa, adicionalmente, comenta que uno de los momentos que más
recuerda con orgullo, es ver su batería al lado de la de Mike Portnoy, integrante
del grupo Dream Theater.
Para cerrar la entrevista, le
hice esta última pregunta:
¿Qué mensaje le darías a las
nuevas generaciones de músicos que quieren incursionar en la música?
Una de las cosas que nos dijo
Gerardo es que es muy importante creer en nosotros mismos, así como en lo que
hacemos, también comento que hay que creer en algo superior, positivo y
bondadoso, él siempre ha sentido el apoyo de su hermano como un ángel que lo
acompaña. Por último menciono que la clave para no caer en el mundo de la
música es no consumir ninguna droga.
Después de esto le agradecí por
su tiempo, nos tomamos una foto y nos despedimos.
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